El Viernes 11 se cumplió más de 60 años la fundación del colegio La Alegría en el Señor, el colegio donde estudié y aprendí cosas aparte de los cursos en sí, como matemáticas, lenguaje, historia o geografía, en el colegio me enseñaron como valerme por mi mismo y para gente como nosotros no hay discapacidad, pena o lástima. Yo entré en el año 79 y fuí el primer alumno de la srta. Araceli, ex alumna del colegio. En ese año el colegio cumplió 25 años (bodas de plata), yo me acuerdo bien porque la sra. Agusta le hicieron un homenaje porque ella y la srta. Rosmery fueron las dos que fundaron el colegio, luego del 79 hasta ahora osea más de 36 años conozco a Juan Luis Aponte, con él crecí y éramos como Bart Simpson y su amigo Milkhouse que a todas partes ibamos juntos; a parte que en el colegio había una especie de ley no escrita que era que todos los que podrían caminar o tenían menores lesiones tenían que ayudar a los más lesionados o los que no podían caminar. En algunos casos eso era desde primer grado hasta quinto de secundaria, sino pregúntenle a Soledad López y a Elvira Zapata. Había una unión que más que colegio parecía una especie de hermandad porque todos nos ayudábamos y los que no podían tenían que pedir a otro que le haga, pero el que más ayudaba ahí era Julio Quevedo, era él pequeño Juan del colegio, porque era grande, fuerte y al mismo tiempo tenía un buen corazón, por ejemplo a mí me cargaba varias veces y en la piscina me agarraba él también. La más inteligente y creo que hasta ahora lo es Valeria García, la gringa desde cuarto grado hasta sexto grado empató el primer lugar del salón con un tal Roberto Oshiro. También había chicos que estaban afectados psicológicamente como mi amigo Oscar que vino de Ayacucho en plena época de Sendero Luminoso.
En mis tantas idas y venidas con Juan Luis varias veces me he caído, una de las peores fue cuando me caí de la rampa pero para la izquierda donde no hay protección, porque la bajada tenía dos lados una escalera y una rampa y yo me caí del lado de la rampa donde no estana la escalera. Me saque un chinchón que Yae se asustó, después cuantas veces no me he caído en el camino de tierra que iba del salón al taller, porque esa zona era pura tierra y la llanta chiquita se quedaba en los huecos y si uno venía corriendo, olvídate pues, es decir que tenía chinchones como cancha. No se si era mi percepción pero parecía que yo era el único premiado. En los 8 años que estuve en el colegio no vi o no tuve la noticia que otro de sillas de ruedas se haya caído ahí, de muletas sí, pero de silla de ruedas no. Por ejemplo mi amigo Angel Rivas tampoco que yo sepa nunca se cayó ahí, Valeria tampoco, los Zapata menos, Alberto Diaz si se cayó ahí, Enrique Camino del taller al salón que era pura tierra como estaba explicando, parecía que en esa época todos tenían lesiones similares, por ejemplo Alberto Diaz deían en son de broma que su hijo era Joshua porque caminaban igualitos, despues Julio Quevedo decian que su hijo era Alvaro porque tenían la misma "enfermedad ", nunca encontré alguien que tenga mi lesión, osea epástico y movimientos involuntarios.
En los 8 años que estuve en el colegio la pase bien, otro de los recuerdos del colegio que nunca me voy a olvidar era que cuando iban a visitar de la colonia japonesa en los 80 que yo era el único nikei todos me bromeaban desde la sra. Fela hasta Alberto me decían hablale japonés, ha venido tu familia, era un vacilón, después un año me tocó sentarme con la Srta. Rosmery que era la directora del colegio, ella nos hacia comer todo, yo aceptaba pero mi debilidad era y sigue siendo el mango que de olerlo nomás me da nausea, ahora imaginense como será comer un mango, para mi toda una tortura que me tuve que quedar hasta las 2 de la tarde, felizmente que fue una vez nomás. Lo que tampoco me puedo olvidar era la crema de espinaca que parecía una especie de aguadito. Tampoco me voy a olvidar de la mazamorra de trigol, todos esos buenos momentos se frustraron cuando tuve problemas con una profesora y me tuve que salir, esa tal vez ha sido la única cosa que no pude hacer y que de alguna manera me molesta no haber terminado con mis compañeros de toda la vida. Lo bueno es que hice la primera comunión y la confirmación. En la confirmación como mi padrino fue mi tio Golo y como es calvito y con bigotes todos decian que era Miyagui de Karate Kid y eso le dio risa a Yae y Takeo. Ahora el colegio tiene otra administración y la gente se estaba quejando porque la nueva administración no les dejan entrar a los ex-alumnos.
En cuanto a los chicos me acuerdo que Juan Luis cuando estaba en primer grado decia que queria ser heladero y creo que en parte lo consiguió porque tiene su bodega en su casa, Alberto Diaz ayuda a su papá en el trabajo de computación de la empresa de carga de su papá. Valeria García es psicóloga , de Julio Quevedo no se nada aunque la última vez que lo vi era voluntario de Olimpiadas Especiales. La srta. Aracely está en EE.UU. Otro que no se nada de él es Angel Rivas, Oscar vivía en la urbanización Santa Rosa la última vez que lo vi fue ahí, una cosa antes de terminar para confesarles yo siempre he vivido a la sombra de los chicos, mejor dicho yo decía si los chicos son profesionales porque yo no, y no me voy a dar por vencido, creo que así nos han formado en el colegio "La Alegría en el Señor" de nunca rendirse, espero que con la nueva administración continúe esa mística.
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