jueves, 30 de junio de 2022

KATSUO, PERSEVERANCIA, INTELIGENCIA PARA LOS AUTOS DE COLECCIÓN

 

Ayer en la noche me llegó un mensaje al Whatsapp y era de mi prima Fabiola, y es que mi sobrino Katsuo había contado la historia de su vida, por si no lo saben Katsuo nació con una rama de autismo que se llama síndrome de Asperger, que se caracteriza por ser obsesivo pero un poco alejado de la persona, no socializa mucho con las personas, y según lo que dicen este síndrome lo tenía Albert Einstein pero no es cierto, tal vez parecido por su obsesión, no quiero hacer una infidencia pero Katsuo siempre decía la verdad desde que estaba niño; me acuerdo de una anécdota a una señora que le dijo "¿por qué se pinta tanto?", sin llegar a mucho a mi me dice "¿por qué no caminas?"; la cosa es que de muy chiquito él tenía esa curiosidad por los carros y según la historia él se paraba en la calle a ver los carros, tenía la suerte que sus papás le ayudaban y también miraban el tablero y todo eso; según la historia también cuenta que aprendió hablar a los 4 años pero desde los 3 años ya sabía la historia de los autos, de que año eran, la marca y a base de que diseño estaban construídos; con el tiempo sobre todo su papá Rafo lo llevaba a cada convención de autos que había y él tenía sólo 6 años, y llegaba a su casa lleno de folletos de autos, hasta que la familia Castillo Kanashiro descubrieron los autos a escala o lo que les llaman autos de collección, así fue como Fabiola y Rafo compraban carritos en miniatura y tenían contactos con proveedores de autitos, pero el que tenía la vista buena era Katsuo porque si un carrito estaba defectuoso o tenía algo malo no lo compraban o era "bamba" no lo compraban o si era bueno y él no lo tenía no lo vendían tampoco, así le ofrecieran el doble o el triple no lo vendían porque era de Katsuo, estando niño fue considerado el coleccionista menor de edad del Perú y al pasar el tiempo la familia Castillo Kanashiro descubrieron que este era un mundo no para niños sino para grandes y que sus compradores eran ya mayores, que venían de otros países también no sólo de Perú sino del extranjero; ya con el tiempo la tienda que tenían cambio de rubro, se convirtió en una tienda de autos de colección hasta llegó al delivery vía Mercado Libre, la empresa se llamó "Mad Car" mientras tanto Katsuo ha terminado sus estudios y al llegar la pandemia tuvo que estudiar en casa y así terminó sus estudios de empresario, porque él lo que quiere es tener un museo de sus carritos de colleción y también su máxima aspiración es comprarse el modelo Wolkswagen Beach Bomb Rear Loader Pink 1969.

Lo último que supe de él cuando le pregunte a mi prima Faabiola es que tiene una bodega llena de carros y por si acaso con la memoria que él tiene sabe donde están todos los autos, si tu le preguntas por un auto en segundos él va y te lo consigue. Personalmente me hizo acordar a mí cuando estaba chico pero con el fútbol, sobre todo la primera parte que él dijo que cuando tenía 3 años se paraba a ver los carros y yo también era así, cada vez que yo veía jugar fútbol en la calle yo le decía a Yae o Takeo "espérate un ratito yo voy a ver esto" y depende mucho de los padres porque ellos son los que apoyan a su hijo y lo sacan adelante, gracias a Fabiola y a Rafo Katsuo es lo que es. Termino diciendo arigato familia Castillo Kanashiro por enseñarnos una gran lección de vida.




1 comentario:

  1. Un artículo muy entranable. Yo tengo un amiga que también es como Katsuo en eso del coleccionismo.

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