Supuestamente el camino más cercano es la línea recta, pero, para ir a La Punta no es así porque con Takeo, al comienzo íbamos a La Punta todo Buenos Aires, pero luego descubrimos una boca calle que va al costado de la Comisaria de La Punta e iba por toda la parte de atrás del comienzo del distrito, es decir agarraba todo lo que es "La Isla de Gillighan", que es un rompe olas donde la gente se baña y hay que cruzar en botecitos para llegar ahí, a parte de eso habían unas casas bien fúnebres de hace 30 años, las casa eran como casas embrujadas o algo así, pero parecía que habían gente, luego de pasar todo eso llegábamos justo al Coliseo cerrado de La Punta, ahí habían campeonatos de fulbito, habían buenos equipos, a veces me encontraba con mi amigo Alberto Diaz que iba también a ver los campeonatos de fulbito, estos partidos eran en la noche, desde las 6:00 pm hasta las 10:00 pm; cada partido duraba 1 hora más o menos, luego de eso íbamos a comer picarones con Eric y Pancho, el que siempre me acompañaba era Eric, Panchito decía 50 céntimos para tomar mi carro e ir a la casa, a veces también nos acompañaba "Cuchilla", pero luego en los 90 cuando ya se puso medio brava la cosa, nos íbamos por el otro lado, Chucuito y La Punta en si hasta llegar al Regatas de La Punta, de ahí nos íbamos por todo cantolao hasta salir al Mercado de La Punta, o sino antes, almorzábamos por ahí en una panadería donde nos recomendó un amigo de Takeo, y hacían ricos pasteles, como el strugel de manzana, que es como un pye de manzana pero enrollado, también hacían galletas y otros pasteles, vendían menú hasta las 2 de la tarde, porque la tienda se dividía en dos, una era la cafetería, y por ese lado vendían menú, y el otro lado que daba a otra calle era la panadería donde vendían panes, pasteles y muchas cosas ricas, o sino nos íbamos a comer pizzas o ravioles en un restaurante que está en la cuadra del mercado de La Punta, o sino nos íbamos hasta donde venden anticuchos, también había otro restaurante donde hacían pastas y realmente era más rico, venía con su pan calientito y su plato de fondo, nosotros éramos clientes de ahí por alrededor de 25 años, un día me acuerdo que con Takeo supuestamente todo estaba bien, pero, que pasó, en la esquina de Dos de Mayo y Saenz Peña se me sale la llanta de atrás y me asuste, felizmente que un amigo del barrio que estaba por ahí nos ayudó y nos trajo con la llanta al costado, supuestamente en ese día Eric nos estaba acompañando, pero no se porque razón se tuvo que ir y justo pasó eso; al día siguiente le contamos eso a Eric, creo que se sintió un poco mal, pero la manera como vinimos nos dio risa, de verdad que extraño eso, el día domingo que fui a visitar a Alberto me puse a recordar todos esos momentos, ahora Alberto me dice que ya no hay campeonatos de fulbito, y ahora el fulbito lo practican en las mañanas y ya no en las noches. Esos campeonatos eran emocionantes, eran como un mundialito del Porvenir pero sin tanta gente, intervenían gente conocida del barrio de Unión y Buenos Aires, ahora que estoy escribiendo esto lo que me pregunto es no se porque nunca intervino el equipo Oscar Cabrera, que era practicamente la filial de fulbito del Once Amigos, ahí jugaban todos los muchachos del Once Amigos, o la mayoría de ellos; donde si jugaban era en el campeonato del Billis, me acuerdo que Takeo hizo u golazo ahí, porque que en el fulbito no se permitía patear de fuera del área, pero en ese campeonato en los últimos minutos si se podía patear de cualquier distancia al arco y Takeo en una jugada dio media vuelta y pateo de derecha, no se si le habrá salido de "champu" o no se, pero como todos lo conocían gritaban "Chimbombo" "Chimbombo", eso fue hace 20 años, los jugadores del Carrera y del Once Amigos ahora la mayoría están jubilados y todas las mañanas se ponen a hablar de fútbol entre otras cosas en la esquina de Unión y Dos de Mayo.
